La crisis del coronavirus disparó las listas de espera sanitaria en toda España, por ello, las diferentes comunidades autónomas han tenido que tomar medidas para intentar encarrilar la situación. La contratación de más personal y la concertación con la sanidad privada son las principales ‘soluciones’ encargadas de disminuir las largas demoras tanto en listas de espera quirúrgicas, como en pruebas diagnósticas o consultas externas con los especialistas.
En Andalucía, por ejemplo, se utilizan los conciertos de manera complementaria para disminuir las listas de espera, además de otras medidas establecidas en los planes de contingencia. De hecho, la Junta ha contratado cinco hospitales privados en Cádiz y Huelva por “insuficiencia de medios propios” y “problemas de saturación”.
Para atajar el problema de las listas de espera el Gobierno de Aragón ha aprobado un paquete de medidas que incluyen el incremento de la actividad de tarde y fines de semana, la concertación de quirófanos y un convenio con la MAZ para hacer frente a las demora en traumatología.
Medidas que también se aplican en Asturias desde mediados de 2021; el servicio de salud asturiano diseñó un plan de choque con operaciones de tarde y la derivación de pacientes a centros concertados o privados, una decisión que se ha mantenido hasta la actualidad.
Por su parte, la derivación de pacientes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a la sanidad privada siempre ha formado parte del día a día del sistema y continúa manteniéndose. En efecto, sólo en pruebas diagnósticas, se superan los 100 millones de euros anuales.
El flamante presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, aseguró tener como prioridad abordar las listas de espera de su comunidad. Para ello, su gobierno ha diseñado un plan de choque en el que se contempla la concertación con la sanidad privada para reducir la demora quirúrgica a sólo 21 días.
En Extremadura la sanidad pública se apoya desde hace años en la privada tanto para realizar operaciones como para llevar a cabo pruebas diagnósticas. De esta manera, esta colaboración ayuda a descongestionar las listas de espera y evita que se puedan superar los tiempos máximos de espera permitidos por ley.
El Sergas gallego ha derivado a la privada más de 117.000 cirugías y 300.000 pruebas diagnósticas en los últimos cinco años. Galicia ha dedicado durante este tiempo a la contratación de servicios concertados con la privada un 1,56% de su presupuesto general.
El objetivo del gobierno gallego es retornar a los tiempos de espera récord del año 2019 y, como primer paso, marca para 2022 que ninguna área deberá superar los 72 días.
Un total de 39.708 valencianos han sido intervenidos en 2020 a través del Plan de choque contra las listas de espera quirúrgicas en los 27 centros privados que colaboran con la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana. El plan incluye también el 'Autoconcierto', que permite al personal sanitario operar fuera de su jornada laboral.
De igual manera, el Gobierno de Murcia también confía en la colaboración con los hospitales concertados para aligerar las listas de espera y reducir los tiempos de demora. De esta forma, hay profesionales del Servicio Murciano de Salud que realizan parte de su actividad en jornada ordinaria en estos centros concertados, cuando los recursos de los hospitales públicos no son suficientes.
Finalmente, Baleares también ha sido una de las comunidades que ha decidido recurrir a la sanidad privada para descongestionar y reducir sus listas de espera. En realidad, el pasado abril 1.000 pacientes fueron derivados a clínicas privadas de Ibiza en las especialidades de traumatología y radiología para consultas externas con el especialista así como para la realización de resonancias magnéticas y ecografías.