Un 67,1% de los hogares madrileños ha sufrido algún problema de salud mental en el último año, según muestran los resultados de la encuesta 'Grado de preocupación e incidencia de los problemas de salud mental entre los madrileños', llevada a cabo por el Colegio Oficial de Enfermería de Madrid. La ansiedad o los trastornos del sueño son los problemas más presentes que afectan a los madrileños, perjudicando a más de la mitad de las viviendas consultadas, mientras que la depresión se ha sufrido en el 31,6% de ellos.
La información, la difusión y el debate público ha ido arrojando luz sobre un problema, el de la salud mental, que ha aquejado siempre a la sociedad pero que hasta hace poco constituía un tema tabú. Sin embargo, en los últimos años (y especialmente tras la pandemia del coronavirus) se ha visto la imperativa necesidad de invertir en programas sanitarios y formar a profesionales con el fin de ofrecer una respuesta adecuada a la ciudadanía.
Así, por ejemplo, en la Comunidad de Madrid se ha elaborado el Plan Estratégico de Salud Mental y Adicciones 2022-2024 que se propone afrontar los retos identificados bajo el marco del Plan de Acción sobre Salud Mental de la OMS. Entre sus objetivos se encuentran reforzar un liderazgo y una gobernanza eficaces en el ámbito de la Salud Mental, proporcionar en el ámbito comunitario servicios de salud mental completos, con atención social y de forma alineada con la nueva Estrategia de Salud Mental del Ministerio de Sanidad 2022-2026.
En esta línea, la CAM anunció el pasado septiembre que formará, en la convocatoria de residencia para el próximo curso 2023-2024, a casi un 10% más de sanitarios en las especialidades de Psiquiatría, Psiquiatría Infantil y de la Adolescencia (MIR), Psicología Clínica (PIR) y Enfermería de Salud Mental (EIR). Asimismo, también se están realizando talleres y programas de formación en Salud Mental de la Infancia y la Adolescencia para que profesores y orientadores puedan dar herramientas a los alumnos y sepan actuar de la mejor manera ante cualquier necesidad.
50 días de media para la especialidad de psiquiatría
Los datos de agosto publicados por la Consejería de Sanidad madrileña sobre las listas de espera en consultas externas indican que un paciente tiene que aguardar una media aproximada de 50,55 días para la especialidad de psiquiatría. Sin embargo, pese al dato autonómico, las diferencias entre los distintos hospitales de la red pública de la región muestran esperas de lo más variadas, que van de los 3 días a los cuatro meses y medio.
El Hospital Universitario General de Villalba, con 3,24 días de media es el centro con la demora más corta para la primera consulta de psiquiatría. Otros hospitales le siguen de cerca como el Central Cruz Roja San José y Santa Adela, con 6 días, y la Fundación Jiménez Díaz, con 9,67 días de demora. El Rey Juan Carlos, con 10,88 días; el Severo Ochoa, con 11; y el Infanta Elena, con 11,17 brindan los tiempos más bajos de la clasificación.
Hospitales del grupo 3, también conocidos por ser hospitales de alta complejidad, acumulan un mayor retraso y un alto número de pacientes para este especialista de salud mental. El Gregorio Marañón, por ejemplo, brinda consulta en algo más de un mes (37,5 días) mientras que el Ramón y Cajal lo hace en 42,67 días. El Hospital Universitario de La Princesa, con 57 días, y el Clínico San Carlos, con 58, se aproximan a los dos meses de espera; el 12 de Octubre y el Puerta de Hierro de Majadahonda los superan (66 y 74 días, respectivamente); y la Paz se postula como el hospital de gran complejidad con mayor demora en la especialidad de psiquiatría, con 84,54 días.
Sin embargo, hay otros centros hospitalarios que superan las últimas cifras de la Paz, lo que les sitúa en la cola de la red pública madrileña: es el caso del Infanta Sofía y del Hospital del Sureste, con 108 días de demora media. Aunque el que más atasco presenta en su lista de espera para esta especialidad es el Príncipe de Asturias, cuyos pacientes aguardan hasta 140 días para una primera consulta.